A 45 años del nacimiento de una joya cinematográfica: «Atrapado sin salida» también produjo material para el chisme (II).

Probablemente la película que más me guste sea Star Wars —soy fanático de la ciencia-ficción—, sobre todo la parte IV. Por allá por los 80, en una sala de la avenida 23 —la Rampa—, de aquellas que llamaban «video beam», proyectaron un documental de cómo se había hecho «La Guerra de las Galaxias». A tiempo, en una buena fila, ahí estuve yo disfrutando como un niño la «magia» que los realizadores usaron para entregarnos el producto que conocemos.

Con esto quiero decir, que otra de las cosas que me gusta saber de cualquier cosa sobre cine y música es el trasfondo, lo que no se ve en la pantalla o no se escucha en la melodía: los pormenores que le dieron vida a determinada obra. ¡Me encanta conocer esas cosas!

Así que, pensando que hay muchos como yo, para quienes den con este escrito, y como parte de este homenaje a One Flew Over the Cuckoo’s Nest, he hecho una investigación en red sobre esos intríngulis, esos fantasmitas ocultos tras bambalinas, que no dejan de ser interesantes, aunque algunos parezcan chismes.

Es menester mencionar que una de las curiosidades que se le achacan a esta película es la de haber ganado los Óscares principales en la premiación de ese año. Mas, sobre eso, ya hablé en la primera parte de este homenaje, donde hay una muy buena crítica de un gran experto. Si te la perdiste, visita este enlace:

https://wordpress.com/post/elabrevaderojm.com/2102

Una aduana casi condena el proyecto al olvido

Kirk Douglas, quien había protagonizado la adaptación teatral de 1963 de la novela de Ken Kesey, estaba en el punto de adaptar la historia para la pantalla. Douglas se puso en contacto con el director checo Miloš Forman sobre el proyecto, y le prometió enviarle una copia del libro para su examen. 

Douglas envió por correo a Forman la novela, pero el paquete fue confiscado por la aduana checoslovaca, con lo cual nunca llegó al director. Sin conocer el destino del paquete, el cineasta se resintió de la promesa incumplida de Douglas, y Douglas pensó que Forman era grosero por no molestarse en confirmar la recepción de la novela. Tomó una década para resolverse este malentendido, y las cosas solo se aclararon cuando el hijo de Kirk, Michael Douglas, asumió la producción y se puso en contacto con Forman una vez más. 

La historia quedó en la familia Douglas

Antes de que One Flew Over the Cuckoo’s Nest fuera incluso publicado, Kirk Douglas compró los derechos cinematográficos de la novela cuando leyó la historia en 1961. Douglas tenía planes de repetir su papel protagonista en la gran pantalla. Sin embargo, cuando buscaba adaptar el libro a una película, casi todos los grandes estudios lo rechazaron.

Ese proyecto fue tomando demasiado tiempo, y Douglas se hizo demasiado viejo para asumir el papel. Eventualmente, Kirk regalaría los derechos del libro a su hijo Michael con la condición de que todavía recibiera algunos de los beneficios si la película se hacía y tenía éxito. Esto resultó ser una decisión sabia, ya que Michael Douglas ganó un Oscar a la mejor película producida.

El origen de la novela

La novela homónima se basó en las experiencias del autor mientras trabajaba en el Hospital de Administración de Veteranos de Menlo Park, en Palo Alto, California. También había estado participando en experimentos respaldados por el gobierno con drogas psicoactivas, lo que explica por qué la creatividad fluía libremente, incluso cuando la historia se centraba en la opresión.

El título de la película —y la novela— viene de una rima popular estadounidense, la cual se menciona en su totalidad en la novela, pero a la que nunca se hace referencia en la película.

Vintery, mintery, cutery, corn,
Apple seed and apple thorn,
Wire, briar, limber lock
Three geese in a flock
One flew East
One flew West
And one flew over the cuckoo’s nest.

Un gran cambio entre el libro y la película es que el libro es narrado por el «Jefe» Bromden, algo que se desestimó para la película. Debido a eso, el autor Ken Kesey se negó a ver la adaptación cinematográfica de su novela.

Jack Nicholson y Louise Fletcher no fueron las primeras opciones manejadas para sus personajes

Aunque es difícil imaginar a alguien diferente a Jack Nicholson como el rebelde R.P. McMurphy, el papel casi fue para Marlon Brando. Además de Brando, otros actores fueron considerados para el papel: Gene Hackman, James Caan, y Steve McQueen. De hecho, el director Forman originalmente se puso en contacto con Burt Reynolds, Marlon Brando y Gene Hackman para el papel principal.

Pero esos actores rechazaron el papel.

En la novela, el personaje principal, Randle P. McMurphy, es en realidad un irlandés grande y pelirrojo; bastante diferente a Jack Nicholson, ¿cierto? El papel, al final, se lo dieron a Jack Nicholson porque era el actor más renombrado de Hollywood en ese momento.

En el caso de la enfermera Ratched, varias actrices también fueron consideradas; ese papel era muy buscado en ese momento. Se manejaron nombres como: Anne Bancroft, Colleen Dewhurst, Geraldine Page, Angela Lansbury, Faye Dunaway, Ellen Burstyn, Audrey Hepburn, Jane Fonda, Jeanne Moreau y Shirley MacLaine.

Le tomó un año y varias audiciones a Louise Fletcher para obtenerlo, apenas una semana antes del rodaje.

Kesey no quería a Jack Nicholson en el reparto

Ken Kesey fue muy crítico cuando Jack Nicholson fue elegido como McMurphy, ya que sentía que el actor simplemente no encajaba en el papel. Lo que algunos tal vez no sepan es que Nicholson no fue sugerido por Forman, sino por el director inicial, Hal Ashby. Esto marcaría una pauta importante en la carrera de Nicholson, ya que nunca había interpretado este tipo de personaje antes.

Cuando Nicholson ganó el papel, la producción se retrasó seis meses para adaptarse a su agenda, lo que permitió a Douglas organizar el conjunto perfecto.

El nombre de Ratched

En la novela, el primer nombre de la enfermera Ratched nunca se menciona realmente, lo que ayuda a hacerla un personaje aún más misterioso y amenazante. Sin embargo, en la película, ese no es el caso. Cuando el comité del hospital se reúne con ella para discutir su comportamiento, el doctor Spivey se refiere a ella como «Mildred». Su nombre es mencionado una vez más en la película después de que McMurphy regresa de la terapia de electrochoque. Se sienta en una sesión de terapia de grupo y se refiere a ella como «Mildred».

La elección de «Jefe» Bromden es una historia en sí misma

Will Sampson, que interpreta al jefe, fue elegido para el papel porque era el único nativo americano que el equipo de contratación pudo encontrar que coincidía con el enorme tamaño del personaje: Mide 6 pies 7 pulgadas.

Para elegir el papel del jefe Bromden, la falta de enormes hombres nativos americanos en Hollywood hizo que fuera un reto para los prospectos llenar el papel. Michael Douglas, Saul Zaentz, Milos Forman y Jack Nicholson estaban haciendo un viaje a Salem, Oregón, para ver si el doctor Dean Brooks podía interpretar el papel del Dr. John Spivey y, mientras estaban en el aeropuerto de Portland, vieron a Sampson salir de un vuelo con botas y sombrero de vaquero. Nicholson inmediatamente quiso echarle mano.

Sampson compitió en rodeos durante unos veinte años, y en eso estaba cuando los productores dieron con él. El locutor de Rodeo, Mel Lambert —quien tuvo un papel en la película—, tenía una fuerte relación con la comunidad nativa americana en Oregón, por lo que introdujo al equipo de producción a Will Sampson, a quien le dieron el papel.

Sampson nunca había actuado antes.

Varias de las estrellas de la película tampoco eran actores

Después de decidir que iban a usar el citado hospital como lugar de rodaje, los cineastas también decidieron elegir a personas reales que trabajaban en el hospital, a lo cual es superintendente no se opuso. Por ejemplo, el Dr. Dean Brooks interpreta al Dr. John Spivey, el médico encargado de evaluar la salud mental de McMurphy.

Brooks accedió a interpretar lo que resultó ser un papel considerable, aunque sería el único trabajo de actuación que tomaría. También ayudó a asegurar que emplearan a muchos de los pacientes de su hospital como extras y miembros del equipo durante la producción. 

Mel Lambert, como ya puede haberse adivinado con anterioridad, tampoco era actor. A él se le pidió que interpretara al jefe de puerto que protestó por el viaje de pesca no autorizado de McMurphy y su tripulación.

Lambert era un local, un respetado empresario del área. Pero su inclusión sirvió, asimismo, para llegar hasta el gigante Muscogee, a quien le darían el papel del «Jefe» Bromden. 

Esas personas desconocidas en el fondo de las tomas fueron interpretadas por empleados reales del centro psiquiátrico; ese personal puso los extras.  Muchos extras, también, eran verdaderos pacientes mentales.

Había otras caras no familiares, pero ya en los roles protagónicos. Por ejemplo, Brad Dourif y Christopher Lloyd hicieron su debut cinematográfico aquí.

Filmaron en un verdadero hospital psiquiátrico

One Flew Over The Cuckoo’s Nest fue filmado en un hospital psiquiátrico en Salem, Oregón. Forman incluso pasó un mes viviendo en el Hospital Mental Estatal de Oregón para observar el medio ambiente antes de filmar y rodaría cámaras sin el conocimiento de nadie.

Este hospital fue elegido porque el superintendente, Dr. Dean Kent Brooks, permitió el acceso ilimitado a la instalación, incluyendo la presencia de médicos reales.

Mala sangre entre Forman y Nicholson

Aun considerando que los pormenores del hecho dependan en cierta medida del manejo de los rumores, los informes del set de filmación fueron consistentes en un hecho: Nicholson y Forman se negaron a hablarse durante una gran parte del proceso de producción. La discordia tuvo mucho que con el tratamiento de McMurphy como personaje del filme.

Comenzó con la llegada misma de Nicholson al rodaje: se apareció con una gruesa barba tupida que encontró apropiada para el papel, con la que Forman no estuvo de acuerdo.

Luego, Forman sugirió que los pacientes del hospital ya fuesen rebeldes a la llegada de McMurphy. En cambio, el actor insistió en que tal desaprobación de la autoridad del personal médico sólo debería comenzar después de la introducción de McMurphy en sus vidas y rutinas, convirtiendo a su personaje en la fuerza motriz que hiciera a los reclusos ser cada vez más desobedientes.

Aunque la versión de la historia que vemos en la película hoy en día nos hace suponer que Forman tomó el consejo de Nicholson, este último se negó a interactuar con su director a partir de ese momento. Cuando la estrella y Forman necesitaban comunicarse entre sí, usaron al cineasta Bill Butler, el director de fotografía, como intermediario.

El paroxismo de esta animosidad superó el tiempo de rodaje: Nicholson, incluso, se negó a participar en el material de bonificación de DVD de la película, que fue lanzado décadas después de la finalización de esta.

Los actores vivieron en el hospital durante la producción

Empezando con el director Forman, quien lo hizo un tiempo antes que comenzara la filmación.

Todos los actores que interpretaron a pacientes vivieron en el pabellón psiquiátrico del Hospital Estatal de Oregón durante toda la producción. Personalizaron sus dormitorios y pasaron sus días en el lugar a fin de «hacerse una idea de lo que era estar hospitalizado» —como lo dijo el actor Vincent Schiavelli—, e interactuar con pacientes psiquiátricos reales. Eso también ayudó a los actores a entrar en sus personajes.

Muchas escenas fueron filmadas sin el conocimiento de los actores

Para hacer que la película se sintiera lo más realista posible, Forman instruyó a los intérpretes para que llevaran a cabo sesiones de terapia sin guiones en las que los actores desarrollarían los problemas psicológicos de su personaje por su cuenta.

A menudo, capturaba imágenes de los actores, tanto dentro como fuera del personaje, sin mencionar que las cámaras estaban rodando. Así que el director Forman hizo un montón de rodaje para la película que no estaba en el guion, y hubo varias reacciones de los personajes que fueron completamente genuinas.

Por ejemplo, el corte final de la película incluye una toma en la que Fletcher se muestra visiblemente irritada al reaccionar a una instrucción dada por Forman.

En otra escena, Nicholson recibió instrucciones de saltar sobre uno de los guardias que lo trasladaba y besarlo a la llegada de su personaje al hospital. Más tarde, Nicholson le hizo lo mismo a otro guardia que no lo esperaba, tomándolo por sorpresa.

Nicholson confiesa haber improvisado mucho en aquella película.

Esas sesiones de terapia de grupo fueron tan extenuantes, que la escena de la fiesta fue bienvenida por el elenco como un chance para «respirar aire fresco».

Y hablando de improvisar…

La mayor parte de la escena de Jack Nicholson con el Dr. Brooks al llegar al hospital fue improvisada, incluyendo el golpe a la grapadora, preguntar sobre la foto de pesca, y discutir su condena por violación. Las reacciones de Brooks a Nicholson en esa escena fueron 100% auténticas.

Louise Fletcher cambió la opinión de Forman sobre el personaje

La visión original de Forman sobre la enfermera Ratched era como «la personificación del mal», una caracterización que hizo de Louise Fletcher una mala opción para el papel en la mente del cineasta. Mientras Fletcher presionaba para el papel, la perspectiva de Forman de Ratched evolucionó:

«Poco a poco empecé a darme cuenta de que sería mucho más poderoso si no fuera este mal visible. Que es sólo un instrumento del mal. No sabe que es malvada. Ella, de hecho, cree que está ayudando a la gente». Esta nueva versión del personaje allanó el camino para la contratación oficial de Fletcher.

Un rodaje difícil para Danny DeVito y su amigo imaginario

El programa de rodaje de One Flew Over the Cuckoo’s Nest fue intenso, y mantuvo a Danny DeVito a tres mil millas de su futura esposa, Rhea Perlman. Emocionalmente tenso por ese exigente calendario de rodaje, DeVito creó un amigo imaginario con el que tendría charlas nocturnas.

Sin embargo, llegó al punto de cuestionarse su estado mental. Entonces, DeVito buscó el consejo del Dr. Brooks, quien le aseguró que no había razón para preocuparse mientras DeVito pudiera identificar a su amigo como ficticio.

¡No te pierdas la tercera parte de este homenaje, que viene con mucha más información interesante, fotos y videos!

Publicado por jmhernandezgonzalez

Cubano por nacimiento y corazón. Amigo de quien se lo merece, porque nada comparable con el amor a la familia como la lealtad a un buen amigo. ¿Escritor? Solamente sé que escribir para mí es más que multiplicarme en la inmensidad del tiempo y el espacio dando campanazos de imaginación.

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